Las fuerzas armadas de Estados Unidos en Afganistán confirmaron que el avión que se estrelló este lunes en pertenecía a la corporación, pero negaron que haya sido derribado por talibanes.
Las fuerzas estadounidenses en Afganistán han reconocido que el avión que se estrelló este lunes al este de aquel país pertenecía a la corporación, aunque negaron que este haya sido por los talibanes insurgentes.
El avión se estrelló este lunes en el distrito de Deh Yak en medio de una fuerte confusión, pues los talibanes aseguraron que se trataba de un avión militar estadounidense y se adjudicaban su derribo, en el que “todos los tripulantes del avión y los oficiales de la CIA (Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos) a bordo murieron”.
“Un bombardero de EEU E-11A se estrelló hoy en la provincia de Ghazni (…) Mientras las causas de la colisión están siendo investigadas, no hay indicios de que la colisión se debiera a fuego enemigo”, aseguró en su cuenta de Twitter Sonny Leggett, vocero del Ejército estadounidense en Afganistán.
“Cerca de la 1:10 PM un avión se estrelló en el distrito Deh Yak de la provincia de Ghanzi. El avión se incendió y los habitantes locales intentaban apagar el fuego. No sabemos aún si es un avión militar o civil”, indicó en su momento Aref Noori, portavoz del gobierno afgano.
La reivindicación de los talibanes surgió después de que las autoridades afganas manifestaran su duda sobre qué tipo de avión era, a medida que las aerolíneas negaban que se tratara de un vuelo comercial y surgían imágenes del avión estrellado que apuntaban a que se trataba de un avión estadounidense, versión que fue finalmente confirmada.
Funcionarios de Estados Unidos, bajo anonimato, describieron la aeronave como un pequeño avión militar estadounidense en el que al menos viajaban una decena de personas.
El incidente ocurrió en “un área bajo control talibán”, según advirtió anteriormente el miembro de la Asamblea provincial de Ghanzi Khaliqdad Akbari. Según el portavoz “recientemente, los insurgentes derribaron y dispararon a varios aviones y helicópteros de los invasores y sus títeres (afganos)” en varios lugares de Afganistán.
La versión oficial que hasta el momento es “preliminar” que ofreció el gobernador de Ghazni, Arif Noori, refería que “ningún pasajero sobrevivió”, y que los muertos podrían ser “decenas”, además señaló que tras el impacto, vecinos de la zona “han sacado dos cadáveres, ambos de los pilotos”.