Inhumano, un hombre le prendió fuego a un indigente mientras este dormía cerca de la puerta de un McDonald’s como venganza
Hombre tendrá que pasar 10 años en la cárcel por lograr completar su venganza contra un indigente, puesto que cuando este último se encontraba durmiendo en la puerta de un McDonald’s le roció una botella de gasolina y luego le prendió fuego, mientras esto ocurría solo lo miraba quemarse.
David Weir, de 53 años, atacó a Thomas Smith el día de Año Nuevo a las afueras de una sucursal de McDonald’s en Luton, por lo que las personas que se encontraban cerca lo vieron se apresuraron para ayudar al indigente envuelto en llamas a quitarse la ropa.
Un día después, regresó y envolvió a Thomas en una bola de fuego dejándolo con un dolor que describió como “irreal”, los compradores lo vieron rodando por el pavimento para tratar de apagar las llamas.
Por su fuera poco el pirómano, Weir, permaneció en la escena, paseándose hasta que llegó la policía y luego escupió al agente Matthew Bright mientras estaba bajo custodia, al lograr ser cuestionado Thomas le dijo a la policía: ‘No tengo idea de por qué el atacante me haría esto. El nivel de violencia y agresión fue tan extremo que estoy seguro de que tenía la intención de matarme”.
Posteriormente Thomas tuvo que ser trasladado al Hospital Luton and Dunstable donde fue tratado por quemaduras en la cara, dedos y muñecas después de quedar cubierto de ampollas y piel descascarada.
Pasó tres días en una unidad especializada en quemaduras, pero no requirió cirugía y desde entonces se ha negado a aceptar el tratamiento de seguimiento, Weir por su parte fue encarcelado por 10 años y seis meses con un término mínimo tras las rejas de siete años.
El juez Mark Bishop le dijo a Weir: ‘El público debe estar protegido de usted. Por tus acciones has demostrado ser capaz de crueldad premeditada y cruel, además que ese día muchos niños pequeños habían estado en el restaurante McDonald ese día y fueron testigos del ataque.
El detective Gary Hatton dijo: ‘Weir se fue deliberadamente de su casa ese día con una botella llena de gasolina para usarla y dejar gravemente herido a otro hombre.
“Estamos realmente agradecidos por la intervención de aquellos transeúntes que, sin temor a su propia seguridad, apagaron las llamas y salvaron a la víctima de más daños”, dijo el detective Gary Hatton, luego confrontaron a Weir y permanecieron en la escena hasta que fue arrestado.