La segunda entrega del peritaje de la empresa noruega DNV sobre el desplome de una estructura en la Línea 12 del Metro, se daría a conocer este lunes y revelar nuevos problemas en el accidente del 3 de mayo, que mató a 26 personas y dejó heridas a 100 más.
Por su parte, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, informó este lunes que la firma noruega solicitó más tiempo para presentar el informe, además agregó que será este mismo día cuando se publicará un boletín con la nueva fecha de entrega.
Todo parece indicar que la empresa DNV ampliará los hallazgos de la primera parte del estudio con la inclusión de nuevos elementos sobre el origen de la tragedia.
Hay que destacar que con la entrega de este dictamen y el reporte final, previsto para septiembre, DNV establecerá cuáles fueron las causas inmediatas del percance y problemas sistémicos en la operación de la Línea 12 del Metro.
En los avances de las investigaciones se ha resaltado que entre los nuevos elementos que se darán a conocer están las conclusiones sobre cuatro potenciales causas inmediatas de la falla.
Se hablará del planteamiento lateral-torsional de las vigas de acero; trituración de la losa de concreto, influencia de cargas por el sistema de ferrocarril y la falta de mantenimiento de la infraestructura.
Tambien ha salido a la luz un borrador preliminar del estudio de DNV señala que ninguno de los elementos antes citado pudo ser, por sí solo, causante de la tragedia; necesariamente tuvo que haber una combinación de dos o más aspectos para generar el colapso.
En el análisis que se realizó se ha expuesto que en la zona del siniestro se identificaron varios factores de riesgo, entre ellos, están los aspectos de construcción, como la anexión de una viga para un tercer carril y diferencias de asentamientos en los cimientos poco profundos y profundos.
Por otro lado también se identificaron aspectos de riesgo por el uso de diversos tipos de concreto, así como la efectividad de conexión del concreto prefabricado y el concreto colado.
Por último se también se estudió, como factor de riesgo, el impacto que tuvo en la estructura lo ocurrido con el terremoto del 19 de septiembre de 2017 y se señala un “potencial déficit” de mantenimiento de elementos de trabajo civil en el sistema férreo.