La nueva ola será impulsada por la variante B.1.1.7. y se extenderá con fuerza ante la suavización de medidas en las entidades federativas.
ESTADOS UNIDOS.- Tras meses de devastación que hacían parecer que las cosas ahora sí irían en dirección contraria, niveles altos de nuevos casos y una posible tercera ola de la pandemia se avizoran en la Unión Americana.
Los números de hospitalizaciones se han reducido y el número de intoxicaciones se estabilizó en niveles muy altos, un promedio de aproximadamente 60 mil casos diarios.
CNN reportó que varios gobernadores han suavizado las medidas de seguridad contra el Covid-19, pese a las advertencias de los funcionarios de salud y la llegada del periodo vacacional de primavera.
Los expertos proyectan que el país está a punto de ver otra peligrosa ola de coronavirus. Una que, según especialistas, será impulsada por la variante B.1.1.7, vista por primera vez en el Reino Unido y llegará durante las próximas 6 a 14 semanas”, reportó el medio.
“Hace cuatro semanas, la variante B.1.1.7 constituía entre el 1% y el 4% del virus que veíamos en las comunidades de todo el país. Hoy es entre el 30% y el 40%”, opinó Michael Osterhom, director del Centro de Investigación y Política de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Minnesota.
A mediados de enero, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades advirtieron que los casos de la variante probablemente experimentarían un rápido crecimiento a principios de 2021, y agregaron que probablemente se convertiría en la variante predominante en Estados Unidos en este mes.
Una nueva investigación muestra que en Estados Unidos la variante es entre un 59% y un 74% más transmisible que el coronavirus original.