Culiacán, Sin.- “Si no te mata el Covid, la pobreza y la falta de apoyo de los patrones te acaban lentamente, lamenta Florencio.
Pálido, desmoralizado mirando al firmamento, Florencio sentado en una de las bancas de la plazuela de catedral, deja pasar las horas, la enfermedad le cayó como un fardo en su vida, porque tiene temor de perder su trabajo y su familia.
Es chofer de una ruta de camiones y apenas está saliendo del contagio del Covid-19, su enfermedad la pasó aislado en su casa, sin más ayuda que la que le brindaron sus hijos y su esposa quienes siguen en la calle vendiendo lo que pueden para ayudarlo.
“Los patrones nos dejan a nuestra suerte a todos los que nos hemos contagiado, no tenemos ningún tipo de seguridad y el sueldo ni para que les digo”, señala.
Advierte que otro problema que tiene que cargar, es la estigmatización de que se contagió.
“Si saben de qué ruta soy, la gente ya no va a querer tomar el camión que si Dios me permite volveré a conducir, porque eso es lo que se, ese es mi destino, además de que me gusta, porque si no transportamos a la gente a sus trabajos a sus casas, quién lo hace”.
Señala que tiene tres hijos, dos niños de doce, diez y una niña de ocho años y su mayor preocupación era que sus hijos se contagiaran.
“Desde que me enfermé, le pedí a mi mujer que me dejara solo, ella se fue con los hijos con su familia, una hermana era la que me apoyaba dejándome los alimentos casi en la calle”, comenta.
Dice que desde que dejó de trabajar la situación económica en su familia se tornó muy difícil, su esposa y sus hijos empezaron a trabajar para solventar los gastos y los medicamentos que requería.
“Siento que ya se están cansando de todo esto, no puedo apoyar porque me siento muy débil. Los acompaño a buscar el alimento del día, pero no puedo, por eso aquí me tiene en esta banca”, lamenta.
De acuerdo al secretario general del Sindicato de Choferes en Culiacán, Flavio Rolando Ibarra, en Culiacán son más de 23 choferes del transporte público que han dado positivo al Covid-19 y lamenta que para estas familias sortear la pandemia ha sido un verdadero calvario.
El líder sindicar confirma lo que señala el chofer contagiado de que no tienen seguridad social por lo que es una verdadera odisea sortear el contagio y resurgir avante como salió Florencio, ya que su suelo no les alcanza para comprar medicamentos.
Detallo que hay más consciencia entre los choferes que en los permisionarios, ya que cuando se les manifiestan los síntomas éstos se aíslan sin ningún apoyo de sus patrones, por ello, urgió a las autoridades para que obliguen a los permisionarios a asegurar a sus trabajadores.
Iban, es otro chofer, quien asegura que al igual que el resto de los transportistas tienen miedo a los contagios, “pero que podemos hacer, a nosotros nos tocó sortear esta pandemia, nuestro trabajo es igual que otros, pero en esta ocasión, como dicen somos de la primera línea”.
Lamenta que la nueva normalidad, sea el pésimo juicio porque la gente hasta se enoja cuando no la quieren subir al camión si no trae cubrebocas.
“Los usuarios nos mientan la madre, uno hasta me retó a liarme de golpes con él, afortunadamente los pasajeros me apoyaron y no le permitieron subirse. La verdad todos tenemos miedos al contagio y a no tener recursos para hacerle frente a la enfermedad”, dijo.
Contó que uno de sus compañeros se debate entre la vida y la muerte, porque se le complicó, ya que padece de enfermedades crónicas.
“Como compañeros nos damos la mano porque los patrones no se hacen cargo de nada, a ellos, sólo les importa que les llenemos el camión. Afortunadamente los que han enfermado y que están graves, la gente de salud les ha echado la mano, están hospitalizados, pero su familia está desamparada, aquí no tenemos ninguna prestación, si ten enfermas…pos no te incapacitan”.
Con información de: Café negro Portal