El doctor Héctor Aníbal Félix Quintero, quien realiza un posdoctorado en la Facultad de Ciencias Físico-Matemáticas (FCFM) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), destacó el reciente avance en el ámbito agrícola tras la publicación de su investigación en la revista Smart Agricultural Technology, en conjunto con el doctor Cristo Manuel Yee Rendón investigador de la FCFM, Félix Quintero sostuvo que emplearon una técnica de visión por computadora, basada en patrones de interferencia denominados “Speckle”, que permite detectar enfermedades en las plantas de tomate, lo cual podría revolucionar el manejo de cultivos en la región sinaloense.
El proyecto se centró, dijo, en el análisis de imágenes de hojas de tomate a través de un proceso que utiliza un láser para captar patrones únicos en las superficies de las plantas; explicó que esta tecnología permite obtener una especie de “huella digital” de la planta mediante los patrones de interferencia, los cuales reflejan la morfología y rugosidad de las hojas, “este enfoque permite diferenciar entre hojas sanas y aquellas infectadas, como en el caso del virus rugoso, el cual ha causado pérdidas significativas, afectando aproximadamente el 30% de la producción anual en Sinaloa”, comentó.
El investigador explicó que, al capturar múltiples imágenes y analizarlas con algoritmos de visión por computadora, se pueden identificar diferencias precisas en las hojas infectadas, “el método es similar a la tecnología de reconocimiento facial, pero aplicado a las hojas de las plantas, (…), esto facilita una detección temprana de enfermedades y, a largo plazo, podría reducir el impacto económico que representa la pérdida de cultivos”.
Para lograr una mayor efectividad, la investigación avanza ahora hacia una fase en la cual los científicos buscan determinar en qué etapa temprana del desarrollo de la planta pueden detectarse las infecciones, incluso antes de que los síntomas sean visibles. Félix Quintero subrayó la importancia de esta etapa, pues al identificar las plantas infectadas desde sus primeras fases, los agricultores podrían evitar el trasplante de plantas enfermas al campo, lo que minimizaría el riesgo de contagio en grandes áreas de cultivo.
Este método representa una ventaja significativa en comparación con las pruebas de diagnóstico convencionales como la PCR, las cuales son costosas y requieren de tiempos largos para obtener resultados. En cambio, esta técnica de detección es rápida y económicamente viable, afirmó.
La investigación continúa con la colaboración de expertos en química y agronomía, y se espera que, en futuras etapas, se realicen pruebas de campo que validen su aplicación práctica, finalizó el doctor Héctor Aníbal Félix Quintero.