Tras la detención de Derek Chauvin, manifestantes pedían el arresto de los otros policías involucrados en la muerte de George Floyd.
Las protestas y disturbios han estallado en ciudades de todo Estados Unidos después de que aparecieron imágenes de Derek Chauvin arrodillado en el cuello del George Floyd durante casi nueve minutos mientras decía repetidamente “No puedo respirar”.
El policía despedido de Minneapolis fue arrestado el viernes 28 de mayo acusado de asesinato en tercer grado, pero muchos manifestantes dijeron que esta medida no fue lo suficientemente fuerte, por lo que pidieron una acusación más grave y que arresten a los otros tres oficiales. Ayer, el cargo fue elevado a asesinato en segundo grado, y los colegas Thomas Lane, Tou Thao y J Alexander Kueng fueron detenidos y acusados de ayudar e incitar a homicidios en segundo grado y homicidio involuntario en segundo grado.
Si son declarados culpables, podrían ser condenados a hasta cuatro décadas de prisión. El nuevo cargo de asesinato en segundo grado alega que Chauvin causó la muerte de Floyd sin intención mientras cometía otro delito grave, asalto en tercer grado. En comparación, el cargo de asesinato en tercer grado anterior conlleva un máximo de 25 años. Los múltiples cargos contra cada oficial ofrecerían a un jurado más opciones para declararlos culpables.
Ayer, la Oficina del médico forense del condado de Hennepin publicó el informe completo de la autopsia sobre George Floyd, que señaló que previamente había dado positivo por COVID-19, pero que sin embargo era asintomático. El informe fue publicado con el permiso de la familia después de los hallazgos sumarios del lunes que decían que sufrió un ataque cardíaco mientras los agentes lo inmovilizaban.
Las manifestaciones en ciudades de los Estados Unidos que condenan el racismo y la brutalidad policial se volvieron notablemente más moderadas en la víspera del servicio conmemorativo de hoy para George Floyd, iniciando una serie de eventos para llorar al hombre cuya muerte dio poder a un movimiento nacional.
En todo el país, más de 10 mil personas han sido arrestadas en relación con los disturbios. Se han reportado más de una docena de muertes a medida que las protestas se convirtieron en caos, con saqueadores irrumpiendo en tiendas y personas incendiando automóviles y edificios. Las protestas de ayer fueron grandes pero pacíficas en California, donde las estrellas de la NBA Steph Curry y Klay Thompson marcharon con manifestantes en Oakland.
Algunas personas se acostaron para representar la cantidad de tiempo que un oficial de policía blanco presionó una rodilla en el cuello de Floyd mientras suplicaba por aire. Los oficiales mantuvieron una política principalmente de no intervención durante el día, incluso después de que el toque de queda entró en vigencia.
La primera de las tres reuniones conmemorativas se planeó esta tarde en Minneapolis en un servicio donde hablarán el líder de los derechos civiles, el reverendo Al Sharpton y el abogado de la familia Ben Crump. El cuerpo de My Floyd viajará a Raeford, Carolina del Norte, donde nació hace 46 años, para una visita pública y un servicio familiar privado el sábado. Habrá un gran servicio el lunes en Houston, Texas, donde la víctima pasó la mayor parte de su vida. Incluirá los discursos del reverendo Sharpton, el señor Crump y el pastor de la familia, el reverendo Remus E. Wright. El ex vicepresidente y presunto candidato presidencial demócrata Joe Biden también podría asistir.
Mientras Trump continúa criticando su manejo de la crisis, el presidente de Estados Unidos afirmó que fue el mejor presidente para la América negra desde Abraham Lincoln, quien abolió la esclavitud en 1863. Esto fue después de un extraña sesión de fotos en la que pacíficos manifestantes de Black Lives Matter y un sacerdote recibieron gases lacrimógenos para que el presidente pudiera posar frente a una iglesia dañada con una Biblia.